El panameño Michael Hicks se reportó el domingo en la noche a Marinos de Anzoátegui con la firme intención de colocar su granito de arena para conquistar el título de la temporada 2017 de la Liga Profesional de Baloncesto (LPB).

El panameño Michael Hicks se reportó el domingo en la noche a Marinos de Anzoátegui con la firme intención de colocar su granito de arena para conquistar el título de la temporada 2017 de la Liga Profesional de Baloncesto (LPB).
Hicks llegó al Domo Bolivariano de Barquisimeto acompañado por Oscar Torres y cuando miró al técnico Tony Ruiz salió a saludarlo. Una situación similar sucedió con Gregory Vargas.
“Oye hermano que honor jugar con usted que ya tiene dos años rompiéndola en Israel”, le dijo en tono de broma Hicks al “Súper ratón”, quien será el encargado de hacerle llegar el balón para que tome los tiros.
El alero, que viene de ser campeón con Hebraica Maccabi en la Liga de Uruguay, expresó que conocer a Ruiz y algunos de los jugadores le servirá para acoplarse lo más rápido posible al Acorazado, que desde esta noche afrontará a Guaros de Lara en la final de la zafra.
“Conocer el sistema del técnico Tony Ruiz me puede hacer las cosas más fáciles. También conocer a algunos jugadores como Gregory Vargas porque jugué con él, a Oscar Torres y ‘Pepito’ (Héctor Romero) los conozco porque son jugadores que han tenido recorrido internacional. Eso me puede servir para acoplarme lo más rápido posible”.
El canaleño está consciente de que al venir a un equipo con una plantilla tan larga no lo obliga a tener que hacer más allá de lo que siempre ha hecho.
“Soy un jugador que no tiene que hacer muchas cosas porque voy a ayudar al equipo con lo que siempre he hecho en mi carrera. Además para este primer juego no tendré mucho tiempo con el equipo y quizás me mueva en tiros y algunas jugadas. Cada vez que el técnico me de la oportunidad voy a tratar de hacerlo lo mejor posible”.
Orgullo de jugar una final. Hicks no ocultó su emoción por venir a disputar una final y que tenía tiempo con ganas de actuar en la LPB.
“Le doy las gracias a todos los que hicieron posible que yo pudiera venir. Afrontar una final es un gran orgullo porque desde hace tiempo quería entrar en la liga profesional de Venezuela y no se me había dado la oportunidad y venir a una final es una puerta que me puede abrir muchas puertas”.
Conversó con su compatriota Jaime Lloreda para conocer un poco del circuito y ya quiere jugar en la “Caldera del Diablo” para vivir lo que le adelantó sobre la fanaticada.
“Lloreda me habló muy bien y me dijo que me iba a ir a uno de los mejores clubes del país y que la primera vez que jugó en casa del equipo se quedó sorprendido”.
El próximo viernes tendrá la oportunidad de escuchar la batucada y el «ay ayayay ayayay», pero hoy y mañana buscará aportar para que Marinos tome la ventaja en la serie por el cetro.
Fuente:
Prensa Marinos de Anzoátegui
