Por Jorge Herrera (@jorgeherreran_)
El arranque de año fue extremadamente difícil, sin victorias y eliminados de la Copa del Rey. El Pieno Zvaigzdes no encontraba camino alguno en las competiciones de Lituania y su quinto puesto en la tabla general estaba en riesgo. Afortunadamente, para finales de enero, el Nevezis parecía ayudarlos a cambiar ese rumbo; no obstante, tres derrotas más vinieron en fila y la última trajo dolor al decidirse con un triple del Lietkabelis sobre la chicharra. Ello apagaría a cualquiera, pero no a los de Pasvalyis, que prácticamente dominaron su último duelo ante el Dzukija.
El arranque de año fue extremadamente difícil, sin victorias y eliminados de la Copa del Rey. El Pieno Zvaigzdes no encontraba camino alguno en las competiciones de Lituania y su quinto puesto en la tabla general estaba en riesgo. Afortunadamente, para finales de enero, el Nevezis parecía ayudarlos a cambiar ese rumbo; no obstante, tres derrotas más vinieron en fila y la última trajo dolor al decidirse con un triple del Lietkabelis sobre la chicharra. Ello apagaría a cualquiera, pero no a los de Pasvalyis, que prácticamente dominaron su último duelo ante el Dzukija.

El fantasma de la derrota se hizo rápidamente presente con los visitantes estando al frente todo el primer periodo hasta que una estrella cayó del cielo. Jahenns-Ley Manigat recibió pase tras el rebote, dio un par de botes y, volteando a ver el cronómetro, lanzó un meteorito detrás de la media cancha y este irrumpió en el aro para dar la vuelta al encuentro y colocar el luminoso con una posesión de ventaja para él, Daniel Amigo y sus compañeros. Así se llenó de alegría el banquillo y, por consiguiente, esa emoción se trasladó a la duela con una fluidez de juego que les permitió estar al frente por el resto de la tarde.
Al descanso el diferencial era por 12 puntos, pero esta llegó a ser hasta de 20 puntos con poco más de jugar en el tercer periodo. Bajar del doble dígito era imposible al recibir respuesta de cada una de sus ofensivas y los triples también fueron dinamita para el muro de contención. El resultado final quedó en favor del Pieno por marcador de 79-68 e incluyó una importante actuación del pívot mexicano Amigo, quien se encargó de registrar 11 unidades, 6 rebotes, 3 asistencias y 1 robo.
Cierta tranquilidad vuelve al club con marca de 9-12 y el quinto escalón siendo estable como antes. Para el viernes, la racha tiene altas posibilidades de crecer cuando enfrenten al Šiauliai en casa, actual colero de la Betsafe-LKL con tan solo 5 partidos ganados de 21 posibles.
