El regreso de Kristaps Porzingis fue una de las grandes noticias para Boston en la victoria conseguida en este arranque de las finales de la NBA, donde mostraron su mayor volumen de plantilla ante unos Dallas Mavericks con un Luka Doncic poco acompañado en esta noche de jueves. Los Celtics terminaron imponiéndose por 107-89 para sumar el primer punto de la serie.

El regreso de Kristaps Porzingis fue una de las grandes noticias para Boston en la victoria conseguida en este arranque de las finales de la NBA, donde mostraron su mayor volumen de plantilla ante unos Dallas Mavericks con un Luka Doncic poco acompañado en esta noche de jueves. Los Celtics terminaron imponiéndose por 107-89 para sumar el primer punto de la serie.

La defensa de Boston sobre Luka Doncic fue uno de los factores clave. Aunque el esloveno terminó con 30 puntos y 10 rebotes, sus compañeros estuvieron muy lejos de él en cuanto a anotación y el escolta apenas pudo repartir una asistencia gracias al gran trabajo defensivo de nombres como Jrue Holiday, Derrick White o los propios Jayson Tatum y Jaylen Brown.

«Fue una gran defensa individual. Todo el mundo tiene que asumir el reto de vigilar a esos tipos. Son un equipo increíble y te meten mucha presión con su capacidad para anotar. Todo el mundo se va a tomar su enfrentamiento como algo personal y tendrá orgullo personal en la defensa individual», explicó Joe Mazzulla tras el encuentro.

Por su parte, Porzingis salió desde la banca y anotó 18 de sus 20 puntos en la primera mitad después de casi mes y medio fuera de las canchas, mientras que Jaylen Brown terminó con 22 puntos, 6 rebotes, 3 robos y 3 tapones y Jayson Tatum sumó 16 puntos y 11 rebotes, 5 asistencias. Además, el dominicano Al Horford repitió como titular con 10 puntos, 7 rebotes, 3 asistencias y 2 tapones.

Por los texanos, además de Doncic, PJ Washington totalizó 14 puntos y 8 rebotes y Jaden Hardy aportó 13 puntos y 3 rebotes. El domingo, el segundo partido de la final.