La máxima anotadora del pasado Mundial 2022 y la Americup 2023 firmó este jueves por el subcampeón de la Liga Femenina y volverá a repetir experiencia en la Euroliga. La internacional boricua habló de su nuevo desafío en una entrevista para El Nuevo Día y en Cancha Latina te traemos sus frases más destacadas.

La máxima anotadora del pasado Mundial 2022 y la Americup 2023 firmó este jueves por el subcampeón de la Liga Femenina y volverá a repetir experiencia en la Euroliga. La internacional boricua habló de su nuevo desafío en una entrevista para El Nuevo Día y en Cancha Latina te traemos sus frases más destacadas.
Un nuevo reto con la Euroliga: «Firmé con el Salamanca en lo que es una liga súper competitiva. Estaré nuevamente jugando la Euroliga, adicional a la competición española. Repetiré lo mismo que hice este último año, pero en un escenario distinto. Salamanca es un grandísimo equipo que sucumbió en la final contra Valencia, un conjunto que ya enfrenté en par de ocasiones con mi antiguo equipo de Italia. Será otra oportunidad para enseñarle al mundo que pertenezco a ese nivel»
Con los Juegos Olímpicos en la mira: «Serán mis primeros Juegos. No me siento nerviosa. Estaremos ante lo mejor de lo mejor. Confío mucho en el trabajo que estaremos haciendo. Pienso que tenemos buen chance. Jugar junto a veteranas como Pamela Rosado y Tayra Meléndez, que se han probado en distintos escenarios con Puerto Rico. Hará que todas estemos a la altura del evento»
Haciendo balance de su paso por Italia: «Para mí fue dar un paso al frente en mi carrera. Yo sé que muchas de mis compañeras en ese equipo están acostumbradas a jugar en finales, pero en mi caso fue la primera. Fue una experiencia que le cambia la vida a cualquiera. Aunque perdimos en la final, di lo mejor de mí»
Sus deseos de jugar en Puerto Rico: «Me voy hoy, pero ya regreso a Puerto Rico desde el primer día del campamento de entrenamiento de la Selección a finales de este mes. La he pasado excepcional. Tuve la oportunidad de asistir a un juego en Caguas en el BSN. Una experiencia brutal, un gran ambiente y los fanáticos súper ruidosos. Fue divertido estar allí y disfrutar cómo se vive el baloncesto en la isla. Amaría vivir en Puerto Rico algún día e incluso jugar acá. Obviamente no sé cuándo por lo ajetreado de mi calendario, pero me encantaría»
