El quinteto capitalino se repuso a un inicio lento en el que comenzaron por diferencia de 12 puntos, para terminar imponiéndose por pizarra de 89-80

Los capitalinos arrancaron lentos el duelo en el Gimnasio Olímpico Juan de la Barrera, al igual que sus aficionados. En el pitazo inicial había varios huecos en las gradas que, con el paso de los minutos, se fueron tapizando de rojo y blanco. Conforme avanzaron los minutos, el cuadro local fue recortando la desventaja, primero por un parcial de 19-4,28-19, hasta llegar al 29-33.

El argentino Santiago Scala conectó un triple con poco más de cuatro minutos en el reloj de juego que puso al local con ventaja por primera vez en el encuentro 34-33. Los dos primeros períodos terminaron con ventaja de los emplumados, quienes se fueron con ventaja solo de dos unidades 42/40.

El tercer periodo fue dominado por Diablos Rojos y donde se gestó la victoria al llevarse el parcial 31×19.

Para el último cuarto la pizarra tenía a los endiablados arriba por 10 puntos, la desesperación, perdidas de balón y faltas personales, consumieron a los rapaces quienes fueron perdieron gas, al mismo tiempo que los escarlatas fueron más eficaces ganando casi el doble de rebotes.

El mejor anotador por parte de Diablos Rojos fue Josh Ibarra con 18 puntos más 7 tableros, Michael Smith añadió 12 contables, mientras que el el Venezolano Michael Carrera sumon doble dígito en puntos 10 y rebotes 10, 2 repartos y 2 estafas.