Por Daniel Mérida (@baloncestero)
La reducción del tope salarial en un 25% (de 80.000 a 60.000 dólares) ha molestado a los jugadores del BSN, que ya han mostrado su desacuerdo por una medida que ha sido tomada unilateralmente por la Junta de Directores sin consenso ni notificación previa a los jugadores.

La reducción del tope salarial en un 25% (de 80.000 a 60.000 dólares) ha molestado a los jugadores del BSN, que ya han mostrado su desacuerdo por una medida que ha sido tomada unilateralmente por la Junta de Directores sin consenso ni notificación previa a los jugadores.
«De 10 a 15 jugadores, en su mayoría de peso en la liga, me han dicho que lo ideal sería no jugar», explicó Víctor Vélez, portavoz de la AJBPR en declaraciones a El Vocero. «Yo creo en el diálogo. Pero incluso algunos agentes de jugadores me han dicho que, bajo estas circunstancias, jugar no es una opción»
El BSN justifica esta decisión de romper lo establecido en el convenio colectivo vigente con la situación de emergencia vivida tras el huracán María y con la intención de facilitar.
«Fue una determinación amplia y vaga que se presta para cualquier cosa», siguió explicando Vélez en declaraciones que recoge Primera Hora. «Sin hacer estudios ni consideraciones hacia nosotros para darnos el espacio para discutirlo en una asamblea. Tampoco tomaron en cuenta los efectos en la economía ni en los jugadores. No podemos ser cómplices en esa afrenta. Creo en la negociación, pero no vamos a aceptar lo que hicieron unilateralmente alterar lo que se había acordado»
Carlos Rivera es el presidente de la Asociación de Jugadores y lidera en los próximos días las reuniones del sindicato para planificar las estrategias y las medidas a tomar.
