La competencia en la Liga Nacional arrancó esta semana con dos victorias contundentes de Quilmes y Salta Basket con Nico Ferreyra y Ricky Harris como figuras de esta noche de lunes.

La competencia en la Liga Nacional arrancó esta semana con dos victorias contundentes de Quilmes y Salta Basket con Nico Ferreyra y Ricky Harris como figuras de esta noche de lunes.
Quilmes 98 – Boca 76. El Cervecero obtuvo una importantísima victoria frente a Boca por 98 a 76 en su regreso a Mar del Plata. Con una sólida producción defensiva como base, el Tricolor recuperó el nivel en ataque y revirtió nuevamente un mal momento.
El inicio parejo que tuvo el encuentro fue el esperado, porque las urgencias de ambos equipos se imprimieron en el desarrollo del partido. Quilmes intentó ser el dominador, ensayando una mejor defensa que le provocó cinco pérdidas a su rival. Cuando Boca logró empardar el marcador (12-12) gracias al buen trabajo de Eduardo Vassirani en la pintura, el Cervecero tuvo que bajar la intensidad en ofensiva para dejar de desperdiciar avances, y con el ingreso de Emiliano Basabe, protagonizó un parcial 10-2 que le devolvió la ventaja.
El segundo capítulo lo abrió a toda potencia Sean Evans. El extranjero de Boca entró a la pista y desplegó un gran nivel ofensivo, con Alley Oop incluido, para competir por el tanteador. Quilmes le permitió a su rival entrar en juego con algunas malas decisiones en ataque y así se puso a tiro promediando el cuarto (32-31). No obstante, a Quilmes le bastaron cinco minutos para ejecutar su mejor producción ofensiva y marcar una verdadera diferencia en el tablero y en el desarrollo. Con Nicolás Ferreyra llevando el mando, Ricky Sánchez tomando oportunas decisiones y Basabe anotado junto a Basualdo, el conjunto Tricolor construyó un magnifico parcial 19-2 que lo hizo cerrar la primera mitad 50 a 33 y que llenó de interrogantes al vestuario visitante.
Nicolás Ferreyra ratificó su efectiva noche ofensiva (8/10 en tiros de cancha) y con seis puntos estiró a 22 la distancia en el tablero (60-38). Boca, sin respuestas, quedó quebrado en el juego y sólo sumó cinco puntos en seis minutos. Oportunidad que aprovechó Enzo Ruíz con dos bombazos consecutivos para ir llevando a Quilmes a una ventaja aún mayor. El conjunto de Gustavo Fernández padeció cada segundo del cronómetro y, lejos de buscar respuestas a un compromiso totalmente adverso, sólo esperó, con ansias y frustración, que finalizara el parcial (76-47). Quilmes, con la tranquilidad de la ventaja construida, bajó su producción. Boca apostó al tiro perimetral para ir recortando distancias, pero con un pasaje rápido y certero de Eric Flor, el juego fue quedando en manos cerveceras.

Salta Basket 82 – Estudiantes 60. Los Infernales superaron a Estudiantes de Concordia por 82-60, con Ricky Harris como goleador, con 19 anotaciones.
Los conducidos por Ricardo De Cecco fueron intensos y ordenados en cada posesión, a la falta de efectividad ni bien arrancó el partido, con excepción de Al Thornton que quemó las redes desde los 6,75 metros en el primer lanzamiento de la noche, el elenco salteño nunca perdió la compostura y siguió ejecutando los sistemas. En la otra parte del juego, la defensa, también hubo mucha intensidad, lucha –leal- y garra. Algunos tapones en manos de Espinoza primero y Thornton después fueron una marca registrada de lo actuado en esa primera mitad donde el DT salteño apeló nuevamente a la rotación preservando y administrando aire para sus dirigidos.
Dispuestos a equipara las acciones y tratar de llevarse una victoria a Entre Ríos, el equipo comandado desde lo táctico por Lucas Victoriano mejoró en el tercer cuarto. El gigante español Doblas Portilla hizo pesar su oficio en la zona pintada, el cubano Jasiel Rivero las peleó a todas bien arriba y los perimetrales diagramadores de juego Sebastián Orresta y Mateo Bolivar le imprimieron dinámica. Sobre el final del tercer capítulo una acción defensiva a cargo de Diego Gerbaudo, para luego culminar el ataque en una bomba de Harris, frenó en parte los embates entrerrianos. Como antesala de los últimos 10 minutos el partido se puso bravo para Los Infernales, otra noche cargada de adrenalina y emoción en el Estadio Delmi.
Mucha predisposición a la hora de defender, una constante que siguió en el esquema salteño en pos de la recuperación. Poncho al viento, Los Infernales defendieron cada centímetro de su territorio, luchando por la anaranjada como si fuera la última. Sobre el final no solo que siguieron con la intensidad defensiva, tampoco aflojaron en ofensiva. Ricky Harris fue el goleador infernal con 19 puntos pero el equipo demostró solidaridad a la hora de pasarse el balón y no dejar que el rival encestara. Una de las premisas era volver a promediar 70 o 75 puntos en contra, meta que se cumplió con creces porque Salta ganó 82-60.
Fuente:
Prensa Quilmes y Prensa Salta Basket