«Con todos los jugadores que tenemos creo que la transición va ser más fácil de lo que mucha gente piensa» fue una contundente frase que el seleccionador Daniel Seoane pronunció en rueda de prensa tras la victoria del jueves ante Colombia. Este inicio del torneo clasificatorio ha sido una prueba más para el relevo generacional tras lo ocurrido en los Juegos Panamericanos y en los juegos del Equipo Blanco en paralelo a la preparación a la Copa del Mundo. 

«Con todos los jugadores que tenemos creo que la transición va ser más fácil de lo que mucha gente piensa» fue una contundente frase que el seleccionador Daniel Seoane pronunció en rueda de prensa tras la victoria del jueves ante Colombia. Este inicio del torneo clasificatorio ha sido una prueba más para el relevo generacional tras lo ocurrido en los Juegos Panamericanos y en los juegos del denominado Equipo Blanco en paralelo a la preparación a la Copa del Mundo.

Un balance positivo para esta primera ventana

Viendo los resultados globales de esta primera ventana, ni Venezuela es tan buena como se pensó tras la victoria en el primer partido ni Venezuela es tan desastrosa como se pensó tras la derrota en el segundo juego. La realidad es que los dirigidos por Guillermo Moreno tuvieron un mal primer juego y realizaron diversos ajustes que le fueron exitosos para llevarse el juego en Medellín

De los trece jugadores que participaron en el doble desafío ante la selección cafetera, Anthony Pérez fue el único de los nuevos que contó con participación importante en la rotación vinotinto, mientras que José Materán y José Ascanio estuvieron en la parte final de la segunda unidad, Yeferson Guerra tuvo una participación testimonial en el primer partido y Franger Pirela entró en la convocatoria para el segundo pero no saltó al tabloncillo.

Así, lo que lo más destacable para los interés de la selección vinotinto es que Venezuela ganó por más puntos de los que perdió y se quedó con la serie particular ante Colombia, por lo que el balance deportivo es positivo. Otro aspecto diferente es si fue una ventana positiva para la integración de la generación de relevo.

Los veteranos siguen llevando el peso

Cinco jugadores promediaron más de veinte minutos en los duelos ante Colombia siendo Michael Carrera, Gregory Vargas, Néstor Colmenares, Pedro Chourio y David Cubillán los más utilizados por Daniel Seoane, volviéndose por momentos dependientes en ofensiva de la inspiración del actual jugador de Movistar Estudiantes.

Por su parte, Yohanner Sifontes, Anthony Pérez, Miguel Ruiz y en menor medida Windi Graterol fueron las principales piezas de recambio en una corta rotación de ocho jugadores durante los dos juegos.

Cabe recordar que dos jugadores referentes en torneos anteriores como Jhornan Zamora y Heissler Guillent no estuvieron en esta oportunidad pero tienen opciones de regresar en próximas convocatorias y que el baloncesto venezolano se quedó sin el referente de la generación de relevo tras el triste fallecimiento de Garly Sojo.

El uno por uno de la generación de relevo

El regreso de Anthony Pérez y la buena participación de Yohanner Sifontes fueron lo más destacado del grupo de los no veteranos, así como la presencia de Yeferson Guerra y Franger Pirela, que deberían convertirse en habituales en las convocatorias y sumar minutos e importancia poco a poco. Antes de la realización de la ventana, quizás habría sido esperable que José Ascanio tuviese más minutos y especialmente viendo su buen rendimiento con Oberá Tenis Club en la Liga Nacional argentina

Tanto Guerra como Pirela no son aún jugadores de presente para la selección, pero sí de futuro. «Lalo» está completando su cuarta temporada en el baloncesto español, donde ha sido más rendidor cuando ha estado en Liga EBA (cuarta división), mientras que «Baby» apenas está haciendo su primera experiencia en el exterior y lo está haciendo a gran nivel en Argentina jugando en la Liga de Desarrollo y aún sin debutar con el primer equipo de Unión de Santa Fe.

Los que no estuvieron y podrían estar

Entre las ausencias destaca la de Edgar Martínez, que estuvo en la preselección mundialista, y de nuevo las de jugadores como Luis «Tapipa» Duarte y Anyelo Cisneros, cuyo biotipo para la posición de alero es más que interesante y no existe entre los internacionales habituales. Además, el único jugador de la preselección que no entró en ninguna convocatoria fue Fabrizio Pugliatti, que a sus 20 años está gozando de pocos minutos en el Trapani de la Serie A2 italiana.

Entre otros jugadores que formaron parte del Equipo Blanco, algunos con experiencia profesional como Edwin Mijares, Harol Cazorla, Eliezer Montaño o Luis Carrillo tienen el nivel para dar minutos en la rotación de esta selección.

Si hablamos de jugadores jóvenes con menos experiencia fueron varios los que asistieron como invitados durante los primeros entrenamientos. para esta ventana. Entre los que estaban Jeiminson Márquez, Estoyan Vargas, Diego Sulbarán, Anthony Reyes, Osbel Caraballo, Kender Urbina y Elian Centeno, de los cuales sólo los tres últimos han tenido algún tipo de participación profesional en la SPB.

En esta misma categoría de jugadores con proyección, no hay que olvidar a Edson Tovar, que está debutando esta temporada con Gran Canaria en la LEB Plata española, aunque ido de más a menos en su rendimiento, además de otros como Andrés Marrero, Alejandro Redondo o Enrique Medina, que son jugadores en plena formación, así como Jean Payen, Keiver Marcano o Luis Hurtado.

Los siguientes pasos

Ganar la serie a Colombia hace que los resultados deportivos sean satisfactorios. Sin embargo, la lista de deberes es extensa para los diferentes protagonistas del baloncesto venezolano.

El cuerpo técnico liderado por Daniel Seoane debe hacer un seguimiento de todos estos jugadores que son susceptibles de ser convocados a medio y largo plazo, mientras la FVB debería proporcionar los recursos necesarios para monitorizar a los jugadores e incluso poder traer desde el exterior a algunos de ellos para que trabajen con el combinado nacional en los próximos procesos.

Del lado de la afición y los medios, hay que tener en cuenta la importancia de la información y conocer el estado, rendimiento y nivel de los diferentes torneos donde hacen vida los jugadores. Por ejemplo, no se puede pedir que Yeferson Guerra tenga más minutos ante Colombia cuando apenas los ha tenido aún como profesional. Ya es importante que a «Baby» se le incluya en los procesos de la selección, pero con cautela y paciencia, al igual que con Enrique Medina.

Del mismo modo, basta ya de aquellos fanáticos que siguen pidiendo para la selección a jugadores como Donta Smith, Dwight Lewis o incluso John Cox.

Como bien decía ese mantra de Philadelphia 76ers, confiemos en el proceso (trust the process)