Por Daniel Mérida (@baloncestero)

La segunda jornada de la LUB arrancó con tres partidos en la noche del lunes, aunque sólo dos llegaron a su conclusión. Hebraica y Biguá sumaron triunfos como local y el Aguada-Sayago fue suspendido por una trifulca entre aficiones.

La segunda jornada de la LUB arrancó con tres partidos en la noche del lunes, aunque sólo dos llegaron a su conclusión. Hebraica y Biguá sumaron triunfos como local y el Aguada-Sayago fue suspendido por una trifulca entre aficiones.

Hebraica 97 – Capitol 80. El equipo macabeo se estrenó con triunfo tras la suspensión por humedad en su primer juego. Frazier fue una auténtica pesadilla para la defensa rival y se fue al descanso con 25 puntos para marcar la superioridad macabea. Los visitantes no tuvieron su día en el lanzamiento exterior y sobrevivió con las acciones de Cáceres cerca del aro.

Winsome Frazier terminó con 31 puntos, 4 rebotes, 3 robos y 6/8 en triples, seguido de los 17 puntos, 5 rebotes, 7 asistencias, 2 robos y 3/3 en triples de Gastón Semiglia y los 12 puntos, 12 rebotes y 4 asistencias de Will Hanley. Por los visitantes, Hernando Cáceres sumó 22 puntos y 7 rebotes, Marquez Letcher-Ellis aportó 16 puntos y 7 rebotes y Paul Harrison terminó con 14 puntos, 8 rebotes, 3 asistencias y 2 tapones.

Biguá 84 – Atenas 82. El Pato de Biarritz sumó su segundo triunfo del torneo en un partido marcado por un cierre igualado y un lanzamiento triple de Nicolás Catalá a cuatro segundos del final que pudo haber cambio el resultado final si hubiera entrado. Los locales sustentaron su victoria en una gran segunda parte de Demian Álvarez.

Álvarez terminó con figura ofensiva del Pato con 23 puntos, 4 asistencias y 2 robos, seguido de los 16 puntos y 14 rebotes de Martín Rojas y los 15 puntos y 14 rebotes de Storm Warren. Por los Alas Negras, Isaiah Tyron sumó 22 puntos y 5 rebotes, Nicolás Catalá totalizó 18 puntos y 7 rebotes y Daniel Dingle terminó con 17 puntos, 9 rebotes y 3 tapones.

Suspendido el Aguada-Sayago. Un incidente entre las aficiones de ambos equipos obligó a parar el partido y posteriormente a suspenderlo con apenas la mitad del primer cuarto disputado. El incidente empezó fuera del estadio y terminó en las gradas.