Por Daniel Mérida (@baloncestero)

Nos trasladamos a mayo de 2001 poco después de que la Kinder Bolonia superase a Tau Cerámica en el quinto partido de la gran final de la Euroliga que coronaría al bahiense como MVP de aquella serie final.

Nos trasladamos a mayo de 2001 poco después de que la Kinder Bolonia superase a Tau Cerámica en el quinto partido de la gran final de la Euroliga que coronaría al bahiense como MVP de aquella serie final.

«Ha sido el mejor día de mi carrera. Estoy muy feliz, pero no por el MVP sino por la victoria. Somos un gran equipo y nos mantenimos unidos», explicaba Ginobili tras el partido. «Mi MVP es algo secundario. Ganar la Euroliga es algo muy importante para un equipo joven»

Fue la única final de la Euroliga que se decidió en una eliminatoria a cinco partidos y Ginobili fue parte clave de su desenlace. Pese a que los baskonistas arrancaron ganando como visitantes, los dirigidos por Ettore Messina se repusieron para darle la vuelta a la serie y luego llevarse el quinto y definitivo por 82-74 en un partido donde Antoine Rigaudeau y Manu Ginobili tiraron del carro boloñés con 18 puntos y 16 puntos respectivamente.

Fue una de esas series para guardar con jugadores como Rashard Griffith, Marko Jaric, Matjaz Smodis, David Andersen o Alessandro Abbio por los italianos y jugadores como Elmer Bennett, Luis Scola, Fabricio Oberto, Saulius Stombergas, Mindaugas Timinskas, Victor Alexander o un joven Sergi Vidal por los baskonistas.

Hoy os traemos el quinto partido de la final para disfrutar de un poco de baloncesto desde el sofá de casa: