En un abarrotado Fontajau que presentó un ambiente inolvidable, el Bàsquet Girona ha conquistado el ascenso soñado a la LF Endesa por un Marc Gasol que ha sido clave en el despegue del equipo en la competición. Un jugador que cambió la dinámica del equipo hasta alcanzar el partido decisivo donde ha ejercido de nuevo como MVP para poder imponerse a un Movistar Estudiantes que continuará un año más en la LEB Oro.

El Bàsquet Girona es nuevo equipo de Liga Endesa tras el valioso triunfo cosechado por el conjunto catalán en un encuentro en el que los catalanes llevaron la iniciativa durante todo el partido y en el que la inercia de Marc Gasol fue decisiva para poder conquistar el ansiado objetivo.

Con un ascenso en juego, los protagonistas de la Final no podían irrumpir de otro nodo en el partido que no fuera entrando con todo. De este modo, los campeones del Mundo Javier Beirán y Marc Gasol se citaban sobre el parqué para dirigir los primeros designios de su equipo en un encuentro en el que ni siquiera Johnny Dee quiso quedarse fuera pese a las molestias físicas.

Los mejores ingredientes para un inicio en el que el protagonismo tuvo sin embargo sabor argentino. Porque los 7 puntos de Max Fjellerup, unidos a la primera canasta de Marc Gasol, parecieron querer abrir brecha a favor del conjunto gerundense. O al menos así lo intentó el plantel gerundense acompañando a su ataque con una defensa en zona que no tardó en romper el Movistar Estudiantes. Y es que, entre Johnny Dee y Lucas Faggiano fueron capaces de darle la vuelta al marcador para otorgar así el primer golpe anímico a su rival. Un intercambio de golpes que iba a vivir aún un tercer derechazo, en esta ocasión de la mano de los gerundenses para marcharse al final del acto inaugural por delante (14-19).

Con una tónica muy similar a la del comienzo del partido, el segundo cuarto comenzó con un nuevo paso al frente del Bàsquet Girona desde el tiro exterior. Una buena mano que vivió su momento álgido cuando Kaspars Vecvagars fue capaz de anotar un certero triple que obligó a Movistar Estudiantes a parar el encuentro (20-28). Porque la superioridad física de Felipe dos Anjos en la zona pareció no ser del todo suficiente a la hora de penetras un aro que comenzaba a cerrarse para los madrileños. Fue por ello que el tiempo muerto solicitado por Diego Epifanio pareció venirle bien a su equipo ganando solidez en el rebote ante un rival que se movía ya en rentas máximas (20-30). Pero a base de pico y pala y con Javi Beirán tirando del equipo, los madrileños llegaron a reducir las rentas hasta el -4 en una gran acción final de Johnny Dee sobre la bocina. El partido quedaba así totalmente abierto para la segunda parte (30-34).

Comenzaba la segunda parte y, con ella, el Bàsquet Girona trataba se imponer, por tercera ocasión su ritmo de juego. Así, seis puntos rápidos con triple de Max Fjellerup incluido, permitieron a los gerundenses el poder recuperar una buena renta para poder buscar de nuevo la ruptura (32-40). Ocho puntos que se convirtieron durante un buen número de minutos en la renta media a favor del equipo catalán, concretamente hasta que Marc Gasol fue capaz de firmar un estelar 2+1 en la zona estudiantil para colocar un +10 en el marcador con el que poner tierra de por medio a falta de 13 minutos para la finalización del encuentro (35-45). Las gradas se venían arriba y, con ellas, un Max Fjellerup que subía otro 2+1 al electrónico para poner la directa hacia la victoria. Porque, por si fuera poco, el acierto exterior también acompañó a los catalanes en su objetivo a través de un gran Albert Sàbat (47-58).

Con diez minutos por jugarse y el encuentro totalmente encarrilado, al Bàsquet Girona aún le tocó sufrir una última embestida estudiantil. Porque los madrileños llegaron a ponerse a dos puntos de su rival a falta de tres minutos llevando el choque a un final igualado. Un tramo final de partido en el que las esperanzas del Movistar Estudiantes parecieron avivarse, pero en el que la lucha defensiva de Marc Gasol lideró un último zarpazo con el que dejar la victoria en casa. La bocina final culminaba el ascenso y, con él, la alegría estallaba en el pabellón (60-66)

Estadísticas del partido

Texto y Foto: Área de Comunicación FEB
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