San Lorenzo le ganó a Quimsa por 92 a 91 y se consagró campeón del Súper 20. Tucker con 16 y Piñero con 14 fueron los goleadores en el ganador. En la Fusión, Robinson sumó 25. El Ciclón logró el título que no había podido obtener en las otras dos ediciones.
San Lorenzo le ganó a Quimsa por 92 a 91 y se consagró campeón del Súper 20. Tucker con 16 y Piñero con 14 fueron los goleadores en el ganador. En la Fusión, Robinson sumó 25. El Ciclón logró el título que no había podido obtener en las otras dos ediciones.
El comienzo del partido final del certamen fue muy positivo para San Lorenzo, en menos de tres minutos lograron ponerse arriba con un parcial de 11 a 5 gracias a tres triples consecutivos y una penetración al aro. La constante efectividad del “Azulgrana” a la hora de capturar rebotes ofensivos le dio un margen muy positivo en los primeros momentos del encuentro. A pocos minutos del cierre, Quimsa se puso en partido y con una tremenda volcada de Robinson pudo igualar el resultado. El primer parcial quedó en manos del “Cuervo” por la mínima diferencia.
En la continuidad del primer tiempo, ambos equipos siguieron muy bien posicionados con las conversiones. De a momentos, San Lorenzo sacaba una corta diferencia a su favor y Quimsa hacía lo propio. La gran mayoría del segundo cuarto se mantuvieron igualados con el mismo puntaje hasta que los dirigidos por Néstor García anotaron dos triples para alejarse en el parcial. Ya en los momentos finales, un Vildoza encendido estiró aún más la diferencia a favor del equipo de Capital Federal cerrando el segundo período 47 a 41.
El comienzo del segundo tiempo fue muy parejo para ambos equipos. Con grandes individualidades, San Lorenzo estiraba su ventaja, pero rápidamente Quimsa evitaba que se escapen por mucha diferencia. El tercer período finalizó 77 a 71 con el “Azulgrana” arriba en el resultado. Fue un cuarto de igual a igual con Tucker y Vildoza como principales protagonistas de los terceros 10 minutos.
El “Ciclón” marcó seis puntos en los primeros segundos del último cuarto para sacar la mayor diferencia en lo que iba del partido, por 12 puntos se alejaba el equipo del “Che” García para estar más cerca del título. Quimsa mantenía cubierta la zona pintada y San Lorenzo aprovechaba esto para posicionarse cómodamente en la línea de tres puntos. El DT de Quimsa debió pedir minuto técnico para evitar que el equipo rival siga sacando mayor diferencia. Tras esto, Robinson se mostró muy metido en el juego y achicó la ventaja a sólo siete puntos y el entrenador “Cuervo” recurrió a la mesa de control para pedir tiempo muerto.
Con el correr de los minutos, Quimsa se acercó a dos puntos de diferencia y San Lorenzo se mostraba con muchas irregularidades defensivas como también en ataque. Ravenel tuvo la chance de empatar el encuentro en el final, pero falló el primero de los dos tiros libres que le correspondían tirar y dejó un clima de tensión en el Socios Fundadores. Luego de dos minutos técnicos pedidos por el DT del “Azulgrana”, el equipo de Capital Federal repuso desde el lateral y un rápido robo de Quimsa casi termina dejándole el torneo en las manos a la Fusión. Finalmente, San Lorenzo se consagró campeón del Final 4 y festejó en el sur del país el título que nunca había podido obtener.
El tercer puesto fue para Gimnasia. El Mens Sana le ganó a Instituto por 77 a 74 y se quedó con el tercer lugar del #Final4Super20. Rivero fue el goleador con 17 puntos.
El primer cuarto del partido comenzó con dificultades en el juego. Las reiteradas faltas de ambos equipos no permitieron que se pueda desarrollar con normalidad. Como contra San Lorenzo, Roberto Acuña y Steven Burtt Jr. fueron los destacados en el equipo comodorense, mientras que Dwayne Davis hizo lo propio en el equipo dirigido por Sebastián Ginóbili. Sobre el final del primer período, el “Pitu” Rivero convirtió un triple importante para sacar ventaja de 18 a 15, aunque en un rápido saque, Enzo Rupcic igualó el marcador. La “Gloria” logró llevarse el primer parcial por 22 a 19 dejando el resto del partido con resultado abierto.
El reinicio del partido mostró a un Instituto muy superior al “Verde”, en dos minutos pudo sacar una buena ventaja de 7 puntos de diferencia en el marcador, obligando a Martín Villagrán a pedir minuto técnico y ordenar a su equipo. 2.42 segundos tardó el local en volver a convertir tantos, eso fue algo que Instituto pudo aprovechar para poder generar una mayor ventaja. El equipo de Córdoba seguía mantiendo su eficacia en ataque con Whelan, Rupcic y Espinoza en su mejor momento del partido, mientras que a Gimnasia le costaba mucho defender lo que proponían los dirigidos por “Sepo” Ginóbili. Burtt continuaba con su buen aporte y Jonatan Treise se sumaba a los máximos anotadores del equipo patagónico con cinco unidades. El cierre del primer tiempo dejó en evidencia la dificultad defensiva del equipo de Martín Villagrán y el notable poderío ofensivo de la “Gloria”.
En el comienzo del segundo tiempo no hubo grandes diferencias. Ambos equipos fallaban la gran mayoría de los tiros que ejecutaban al aro. En casi la mitad del tercer cuarto, Gimnasia convirtió siete puntos, mientras que Instituto solamente cinco. La “Gloria” seguía al frente en el tablero gracias a las buenas actuaciones en la zona pintada y al DT comodorense no le quedaba más remedio que pedir minuto técnico y conversar con sus dirigidos. El “Mens Sana” no encontraba manera alguna de frenar al equipo contrario, la visita se mostraba con muy buenas actuaciones desde la línea de tres puntos y en los tiros libres. A muy pocos segundos del cierre del tercer período, un “alley oop” entre Clancy y Romano le permitió a Instituto de Córdoba irse al descanso ganando por 20 puntos. La última parte del partido dio inicio con dos grandes triples del conjunto de local, Buendía y Giorgetti obligaron al DT bahiense a pedir minuto técnico. Los comodorenses pasaban de perder por 22 puntos a achicar la diferencia y quedar a 11 unidades. Juan Manuel Rivero aportaba con una bandeja, una conversión desde la línea de libres y un tremendo triple para dejar con chances al equipo de la Patagonia.
Por otro lado, el equipo cordobés no se mostraba de igual manera que en los anteriores períodos. En pocos más de cinco minutos conseguían convertir solamente seis unidades. Gimnasia seguía con una ráfaga contínua de puntos y conseguía ponerse cada vez más cerca del equipo visitante que no tenía reacción. El “Verde” logró empatar el encuentro en 74 y, a menos de cinco segundos del final, un mal pase de Sam Clancy finalizó en las manos de Steven Burtt Jr. que no tuvo perdón y encestó el triple de la victoria para los dirigidos por Villagrán. Gimnasia se quedó con un tercer puesto muy valioso luego de estar 22 tantos abajo y anotar 34 unidades en el último parcial.
Texto: Prensa Gimnasia
Fotos: La Liga Contenidos