Por Jorge Herrera (@jorgeherreran_)
Si un boricua se ha ganado a la afición mexicana al nivel de Carlos Rivera o Jonathan Rodríguez, ese es Gilberto Clavell. El seleccionado por parte de Puerto Rico ya ha contado con varias incursiones en el baloncesto azteca y su pasado lo ha traído una vez más a las tierras de Zacatecas, donde repetirá con el coach Xavier Aponte en Plateros de Fresnillo.
Si un boricua se ha ganado a la afición mexicana al nivel de Carlos Rivera o Jonathan Rodríguez, ese es Gilberto Clavell. El seleccionado por parte de Puerto Rico ya ha contado con varias incursiones en el baloncesto azteca y su pasado lo ha traído una vez más a las tierras de Zacatecas, donde repetirá con el coach Xavier Aponte en Plateros de Fresnillo.

Clavell, campeón en 2019 con Rigoberto Mendoza y los Santeros de Aguada, es un hombre más que cumplidor en la pintura y sus años en La Isla, como en otras partes del mundo, avalan este sentir. Hablando específicamente de México, el pívot llegó a la LNBP para el primero año de Aguacateros de Michoacán, donde se consagró con más de 15 puntos por partido y 3 rebotes. Más adelante, después de no renovar para el ciclo 2018-2019, decidió regresar con la escuadra de Mineros de Zacatecas dirigida por Allans Colón. Desafortunadamente, debido a la crisis económica de Multimedios, su carta fue traspasada a los fresnillenses, con los cuales cerró el 2020 después de 19 encuentros disputados y promedios de 16.4 unidades por juego, 4.2 tablas y 2.1 asistencias.
Ello le ganó un nuevo contrato en el máximo circuito mexicano y en esta ocasión los ánimos son aún mayores: “Estoy contento de poder volver a vestir sus colores, sudar la camisa y poner en alto a la ciudad de Fresnillo. Gracias a la afición, a la gerencia por traerme de vuelta y vamos encima para traer ese campeonato”.
“No quería espera por el BSN porque hay muchas cosas tentativas. No hay un plan bien claro todavía y me arriesgaba a no jugar en un buen tiempo y quizás por muchos menos chavos porque el BSN va a quitar el 25 por ciento del contrato y yo no quería jugar así, aunque entiendo las razones”, comentó el antiguo integrante de Vaqueros a El Vocero de Puerto Rico. “Antes de firmar, mi agente me dijo que el dueño de Aguada dijo que sí (para la transferencia), que le contestó rápido que me la iba a dar. Yo estaba esperando por otras ofertas con mayor cantidad de dinero, pero mi agente me dijo que aprovechara esta porque hay poco trabajo y mucho jugador”.
El boricua se convierte así en el quinto extranjero de los cuatro permitidos por la liga, después de que se fichara en primera instancia a los argentinos Diego Figueredo, Alejandro Díez, Alexis Elsener y el estadounidense Dior Lowhorn. Plateros arranca la próxima temporada en casa de Mineros de Zacatecas el día 11 de septiembre.